3.1.3. Marcadores recíprocos
En lengua de signos española (LSE), algunos verbos pueden modificarse para expresar reciprocidad. En estos casos, las y los participantes son simultáneamente agentes y receptores (o destinatarios) de la acción. En los verbos de concordancia que se articulan con una mano (signos monomanuales), el valor recíproco se marca utilizando la mano no dominante de forma invertida a la dominante, como ocurre con COMPRENDER y DAR en los ejemplos (1) y (2) (Rodríguez González, 1992, p. 261).
(Nosotros nos entendemos)
(Nos damos la lotería el uno al otro)
En (1) y (2) las dos personas realizan y reciben las acciones de COMPRENDER y DAR. En (1), la orientación de la palma es crucial para determinar quién realiza y quién recibe la acción de COMPRENDER asociada con cada mano. Las trayectorias de los verbos no se cruzan. En cambio, en (2), las trayectorias de DAR articuladas por cada mano se cruzan entre sí, marcando claramente sus lugares de origen y destino.
En verbos de concordancia que se realizan con mano base, como INVITAR (Rodríguez González, 1992, p. 258) la reciprocidad puede marcarse repitiendo e invirtiendo el verbo, como se muestra en (3).
Algunos signos bimanuales, como ENSEÑAR en (4), pueden marcar la reciprocidad mediante la repetición o reduplicación secuencial, moviéndose el verbo desde el sujeto al objeto y viceversa.
Con verbos simples cuyo significado admite reciprocidad, esta puede no marcarse, aunque el sentido recíproco se entienda, como se muestra en (5).
Fernández-Soneira, A. y Villameriel García, S. (2025). Morfología: la flexión verbal: concordancia: marcadores de número. En S. Villameriel García (Ed.), Gramática de la Lengua de Signos Española (GramLSE) / Grammar of Spanish Sign Language (GramLSE). Real Patronato sobre Discapacidad-Centro de Normalización Lingüística de la Lengua de Signos Española. Recuperado el dd de mes de aaaa de https://cnlse.es/es/recursos/gramlse/indice/morfologia/capitulo-3-la-flexion-verbal/3-1-concordancia/3-1-3-marcadores-reciprocos/