Método Signo: ortografía con LSE

Autor/a: MARÍN GARCÍA, Irene
Año: 2021
Editorial: Revista de Estudios de Lenguas de Signos REVLES, núm. 3 (2021) pp. 77-101
Tipo de código: Copyright
Soporte: Digital

Temas

Educación, Educación » Adquisición y desarrollo del lenguaje

Detalles

Es innegable que hoy en día existe una gran preocupación por parte de los docentes ante la multitud de faltas de ortografía que presentan los escritos del alumnado. La ortografía se ha convertido en el caballo de batalla del área de Lengua no solo durante los primeros cursos de la enseñanza obligatoria, sino durante los cursos posteriores, tanto obligatorios como postobligatorios. Y, en consecuencia, es un problema social. El alumnado, por su parte, siente cierto rechazo hacia el aprendizaje tradicional y memorístico de la ortografía. A esto se añade que los jóvenes se comunican mucho más a través de mensajería electrónica, que en contextos informales conlleva una escritura sintética, y que la escritura electrónica de trabajos académicos implica la relajación en el control ortográfico por el corrector automático. Esto debe llevarnos a replantearnos el método de enseñanza de la ortografía que empleamos, puesto que son muchos los autores que han señalado que el problema radica en la metodología utilizada: una metodología tradicional, que poco ha evolucionado con el paso de los años, basada en el estudio memorístico de innumerables reglas ortográficas con sus correspondientes excepciones y en la realización de actividades muy mecánicas para practicar lo memorizado. Por ello, proponemos una nueva forma de enseñar y aprender ortografía, un método innovador para mejorar la ortografía del alumnado, tanto sordo como oyente, mediante el uso lengua de signos española, dado que estas emplean el canal visual, y un sistema que lo motive al aprendizaje ortográfico. Dicho método potencia la atención y correcta memorización visual de las palabras que presentan dificultades ortográficas y que habitualmente provocan errores ortográficos en los escritos de los alumnos, al tiempo que es inclusivo, puesto que acercar al alumnado oyente a la lengua de signos es fundamental.