Apoyos educativos inclusivos en las dificultades de aprendizaje asociadas a discapacidad auditiva
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Desde el informe Warnock (1978) y su novedosa propuesta del concepto de necesidades educativas especiales han pasado casi tres décadas. Durante este tiempo, y en mayor o menor medida, se ha ido incorporando, progresivamente, el concepto de NEE a las aulas y centros educativos. Ya a nadie extraña la presencia en el aula ordinaria de niños/adolescentes con trastornos generalizados del desarrollo, con déficits visuales, trastornos del comportamiento, discapacidades motóricas o intelectuales, y un largo etc. En líneas generales parece existir un razonable consenso en cuanto a la respuesta educativa a las distintas NEE . Tanto las medidas de tipo organizativo (apoyos, n de alumnos por aula...) como las medidas de tipo curricular (adaptaciones, refuerzos etc.) han dado cumplida respuesta a medida que las necesidades se iban haciendo presentes. ¿Ha sido así también en el caso de los niños sordos?, ¿Podemos hablar de consenso metodológico?, ¿Han tenido la misma implantación las adaptaciones curriculares que las adaptaciones de acceso al currículo? Seguramente las respuestas a estas y otras preguntas de similar calado, explicarían algunas de las discrepancias en cuanto a la respuesta educativa dada a estos niños.
En: La función de apoyo educativo inclusivo para afrontar las dificultades en el aprendizaje, pp. 151-170.